16 de junio, Marcha Republicana en Madrid

Publicado el

Categoría: Editorial

El rifirrafe que hemos vivido estos días ante la amenaza de Pedro Sánchez de dimitir y su posterior reafirmación en el cargo han puesto de relieve algunas cuestiones fundamentales.

En primer lugar, la existencia de un aplastante dispositivo mediático y judicial que de forma arbitraria y antidemocrática organiza campañas masivas contra cualquier forma de expresión de la voluntad popular (en este caso la mayoría parlamentaria y el Gobierno al cual corresponde).

Este dispositivo entronca directamente con las instituciones heredadas del franquismo, jamás depuradas, que disfrutan de amplios privilegios y que solo responden a la autoridad del rey, hijo del heredero nombrado por Franco. Instituciones indignadas por medidas como la amnistía, que ponen en tela de juicio su persecución contra los catalanes y la autoridad del rey, que la desencadenó en su discurso del 3 de octubre de 2017.

Los representantes políticos de estos intereses -es decir, los partidos políticos de origen franquista, PP y Vox- se emplean en amplificar y justificar estas campanas antidemocráticas.

Medios de comunicación fuertemente subvencionados por los gobiernos que controlan esos partidos alimentan y amplifican esas campañas con bulos y falsas noticias.

Todo este dispositivo actúa al servicio de los intereses de la gran banca, el capital, la CEOE y demás poderes fácticos.

Así, han atacado a Podemos (20 falsas querellas), a Alberto Rodríguez, a Mónica Oltra, han perseguido -y siguen- a los republicanos catalanes y ahora iban a por el Gobierno de Pedro Sánchez.

De nada ha servido al Gobierno haber subido 450 euros, en 2023, el salario de jueces, fiscales y letrados de la administración de justicia (subida que ha negado al resto de empleados judiciales).

Ante lo cual, ¿qué salida democrática?

Salvo para quienes amen tropezar una y otra vez con la misma piedra, la experiencia de 45 años de monarquía está hecha. Las instituciones heredadas del franquismo no son reformables ni van a ceder su inmenso poder. Acabar con ellas es una necesidad de salud democrática.

Y, sin embargo, no parece que la intención del Gobierno sea atacar de verdad este problema central, sino, como mucho, tratar de llegar a un pacto para introducir algunas reformas, aunque sin tocar los privilegios de la monarquía y su corte.

En la gravísima situación que atravesamos, de amenaza de guerra, de pobreza creciente, de aumento de los gastos militares, de destrucción de la sanidad y demás servicios públicos, esta política es suicida. Conduce, como en Portugal, a la victoria de la derecha y la extrema derecha.

Todos y todas a Madrid el 16-J

Los trabajadores y los pueblos no pueden aceptar la marcha a la guerra, el genocidio de Gaza. Esto no es algo inevitable. Así lo dicen, para todo el mundo, los estudiantes norteamericanos en rebelión contra la política de Biden.

Si las instituciones franquistas no aceptan la amnistía -que es una necesidad democrática- ni la conquista de derechos, la conclusión es que solo con una potente movilización podrá vencerse su oposición.

En última instancia, constatamos que ninguna libertad, ni derecho social conquistado, están asegurados sin acabar con estas instituciones, con este régimen, y abrir la vía a la república, algo de lo que debieran tomar nota todas las organizaciones del movimiento obrero y de los pueblos.

La Marcha Estatal por la República, convocada para el 16 de junio, en el 10.º aniversario de la entronización de Felipe VI, debe materializar esa necesidad. Llamamos a todos nuestros lectores a trabajar para que sea una movilización masiva que permita avanzar para abrir la vía a una nueva situación.

Artículos relacionados

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Comentarios

  • Juan Jose Mira Molero dice:

    como puedo acudir desde sevilla a la marcha a favor de la republica en Madrid.
    Salen autobuses?
    se convoca otea en sevilla?
    Salud y República